9.7.04

Paparazzi

Qué bien se está sin hacer nada...

En estas últimas semanas de caos vital apenas he pisado mi trabajo.
Y qué importa, ya hace tiempo que optimicé todas aquellas rutinas.
Oh, las rutinas!

Decididamente sensual, esta tarde afronto una boda clásica.
Existe un cierto temor por la imagen que pueda mostrar: the look. Cómo me he divertido los días previos con las especulaciones que se han ido suscitando: color del pelo? Lentillas de diseño? Ropa informal? Uñas pintadas?
[Sonrisa maliciosa.]

Mi look –metrosexual, jajajaja– no puede serme más natural.
Desde que el eje principal de mi vida se quebró en un pliegue de extravagacia y dominación determinista, he adquirido un poso que roza la ambigüedad sexual –en toda la extensión de la palabra–.
[Hay quien dice que siempre fui ambiguo...]

El día será largo, permitirá todos los matices.
No sé por qué, me siento un poco puta.
[Y mi cámara digital está lista...]